Por Alfredo López.
En una cárcel de Estados Unidos, a más de quinientas millas de distancia de donde viven su esposa e hijos, en Miami, hace ya 37 años se encuentra el patriota cubano Eduardo Arocena, condenado, por luchar con lealtad y decoro por la libertad de Cuba, su patria. Es Arocena, el preso político más antiguo en el mundo en estos momentos.
Eduardo Arocena ha comparecido en más de una ocasión ante la Corte de justicia, en el trámite de revisión de su sanción de cadena perpetua, sin resultado alguno. Hace poco sufrió un ataque cerebral, del que malamente se va reponiendo. Ni siquiera se ha podido conseguir su traslado para un centro penitenciario cerca del domicilio de su esposa Miriam Arocena, para que ella y los hijos puedan visitarlo en un acercamiento periódico, lo que tanto reconforta a un preso en su aislamiento.
Sus amigos de lucha y simpatizantes en más de una ocasión han recurrido a solicitar de algún que otro Presidente de este país (del que Arocena es ciudadano) la concesión de un indulto, lo que los presidentes suelen hacer al finalizar sus mandatos, pero ninguno hasta ahora, ha atendido el humanismo de coseder el indulto de Arocena, a pesar de su estado de salud y el largo tiempo pasado en prisión en donde ha mantenido una conducta intachable y decente.
En la historia de los indultos que han concedido distintos presidentes de Estados Unidos podemos citar, por ejemplo el concedido a los terroristas independentistas de Puerto Rico que habían llevado a cabo una acción armada contra miembros del Congreso, conocidos como “Los Macheteros”, este grupo terrorista también fueron autores de un asalto armado contra un camión de la compañia Wells Fargo en el Estado de Connecticut en 1983, robándose $ 7 millones de dólares que nunca fueron recuperados por las autoridades bancarias. En cada uno de estos casos citados hubo un caso de muerte.
No obstante, la Presidencia de los EEUU concedió el indulto, o sea, el perdón presidencial.
Es digno de señalar y reprochar el indulto de los espìas de la connotada “Red Avispa” espionaje invasivo de la tiranía de los Castro contra los Estados Unidos. La Red Avispa dirigida por especialistas de inteligencia desde La Habana, realizaron acciones contra este país, planearon el asesinato de cuatro tripulantes de las avionetas de Hermanos al Rescate, de los cuales tres eran ciudadanos americanos. Este crimen fue organizado y planeado en coordinación con la Fuerza Aérea de la tiranía castrocomunista, pulverizando dichas indefensas avionetas en espacio aéreo internacional. Además de otras actividades de virtual peligro contra la seguridad de los Estados Unidos. Sin embargo, la Presidencia de este país “Barack Husein Obama” les otorgó el indulto presidencial.
Una de las últimas peticiones de indulto a la Casa Blanca a favor del patriota Eduardo Aorocena se realizó en Miami, con el respaldo de más de seis mil firmas tras un documento escrito, más unos 600 emails, se preparó la solicitud jurídica-humanitaria en favor del indulto de Eduardo Arocena, sin resultados positivos. Eduardo Arocena no ha sido condenado por actos contra los Estados Unidos, sino por hechos relacionados exclusivamente contra la tiranía que esclaviza al pueblo cubano, ha sido un soldado leal en la lucha por la libertad y la democracia de Cuba.
Arocena se enfrentó a la terrible tirania castrocomunista, a sus bufones, y cómplices que estuvieron al servicio de dicha tirania. Este patriota siempre ayudó a esos valores de libertad y democracia como pilares también de Estados Unidos, Eduardo Arocena, en 1966, se inscribió para el reclutamiento de las Fuerzas Armadas de este país, en la guerra que entonces se libraba en Viet Nam.
Confiemos en que si otros casos que fueron indultados, como los dos que señalé al comienzo de este escrito, en este caso la igualdad “jurídica”, se logre en esta ocasión para Eduardo Arocena. Acudimos al valor humanidad, le pedimos a la administración del presidente Donald Trump un indulto presidencial “urgente”, para el patriota cubano Eduardo Victor Arocena.
Les pido a todos los cubanos decente, que quieren ver a Cuba libre; levanten la voz a favor de la libertad para Eduardo Arocena.
Director de Edición