Eugenio Trujillo Villegas
Director: Sociedad Colombiana Tradición y Acción
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¡El mundo reconoce el heroísmo de Ucrania! Después de 12 días de la brutal invasión rusa, los ucranianos se defienden con un heroísmo que no estaba en las previsiones de Putin. El invasor ha sido humillado, proclamando ante el mundo que el país no capitula ante la brutal embestida del lobo rojo.
El alma de esa resistencia es el presidente Volodimir Zelenski, quien hasta ahora es la gran figura de la guerra. Es el gran defensor de su patria y el símbolo de la resistencia ante la agresión injusta.
Con un ejército muchísimo menor, tanto en hombres como en armas, se revive la lucha entre David y Goliat, pues Ucrania se ha defendido como un león. Las imágenes de esta guerra pasarán a la historia y serán recordadas por siempre, mostrando al pueblo ucraniano enfrentando los tanques rusos.
De otro lado, está la brutalidad del ejército ruso bombardeando sin misericordia a la población civil, destruyendo iglesias, escuelas, hospitales y barrios residenciales. Esta barbarie, que parecía haber desaparecido en nuestro tiempo, ha sido revivida por Putin en forma salvaje.
Aunque sea invadida, Ucrania ganará la guerra
La invasión de Ucrania ha resultado más difícil de lo que Rusia había calculado. Cualquier general sabe que conquistar un territorio puede ser relativamente fácil, pero lo difícil es mantener la conquista a lo largo del tiempo. Aunque Ucrania sea totalmente invadida, al final ganará la guerra, pues sus 48 millones de habitantes se defienden como héroes. Todos se han puesto de pie como un solo hombre en la defensa de la patria.
Ucrania fue aplastada durante 70 años, entre 1922 y 1991, por el dominio totalitario de la URSS. Gracias a esa dominación, una parte importante de la población habla el idioma ruso, lo cual no quiere decir que sean a favor de Rusia. Entre 1932 y 1933 los comunistas rusos masacraron a siete u ocho millones de ucranianos, en un genocidio ordenado por Stalin, ante la resistencia del país a la dominación comunista. Pues bien, ahora Rusia está de regreso al mando de Putin y ningún ucraniano quiere que se repita esa historia de horror.
Hasta ahora, Europa no se ha despertado a pesar de las primeras explosiones de la guerra. Está horrorizada por algo que parecía impensable, y que sin duda no terminará en Ucrania, si es que su respuesta es la cobardía ante la invasión rusa. Si no hay una defensa implacable y coordinada de toda Europa, los tanques rusos avanzarán hasta Varsovia, Oslo, Bruselas, o hacia cualquier otra de las capitales europeas. Además, jamás se puede descartar el peligro anunciado por Putin de lanzar bombas atómicas sobre Occidente.
Este es el actual panorama del mundo, en el cual la paz se ha pulverizado. Desde el final de la Segunda Guerra Mundial la mayoría de las naciones se arrodillaron ante el falso dios de la paz, cediendo una y otra vez ante la agresión del comunismo. Y ahora el resultado es lo que estamos viendo con horror. Putin, el poderoso dictador de Rusia, ha engañado a los pacifistas y ahora despliega su arsenal bélico sobre Europa.
El fracaso absoluto de la ONU
La ONU, que se creó para mantener la paz, solo ha demostrado la más absoluta inoperancia. Sus objetivos actuales están dirigidos a imponer el Nuevo Orden Mundial, a promover el aborto libre y la agenda LGBTI en todas las naciones, y a instaurar en el mundo la religión del ateísmo. ¡Solo que con esas banderas afeminadas y anti naturales le será imposible detener a los agresores!
La brutalidad del inmenso ejército ruso comandado por Putin, revive el fantasma siniestro de Hitler. El mundo libre no tiene otra alternativa que defenderse, pues nadie sabe hasta dónde podrán llegar las intenciones del dictador.
Aunque China fue ambigua durante los primeros días de la guerra, ahora no hay la menor duda acerca de lo que quiere. Su ministro de Relaciones exteriores, Wang Yi, ha declarado que “… la asociación entre Moscú y Pekín es sólida como una roca y contribuye a la paz mundial”. (El País, Madrid, Marzo 7 de 2022). Y para completar, el pasado 4 de febrero, Rusia y China firmaron en Pekín una “alianza sin límites”.
La actitud de China es de apoyo incondicional a la invasión de Ucrania y de Europa. Y será recíproca por parte de Rusia, si es que China decide invadir a Taiwán, a Corea del Sur o a Japón. Recordemos que para el comunismo la verdadera “paz” es la dominación de las naciones bajo la tiranía marxista. Eso es exactamente lo que ellos llaman “paz”, pues todo lo demás son engaños para imponer la opresión totalitaria.
Eso es lo que está aconteciendo también en Colombia. La falsa “paz” de Santos y las FARC, es el camino pavimentado hacia la revolución bolivariana, el nombre tropical con el cual fue bautizado el comunismo venezolano, que es la cabeza de puente de Rusia en América. ¡Más claro es imposible, pero los ciegos prefieren no verlo!
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