Los peces se estancan y viven fácilmente en zonas con poca agua de la presa del Parque Lenin, en La Habana.

Un video compartido en redes sociales por el activista cubano Zaqueo Báez Guerrero muestra a un grupo de hombres, entre ellos varios niños, buscando clarias en el fango de una zona de la presa del Parque Lenin, en Calabazar, La Habana.

"Esa es el hambre que hay en Cuba, son las 6:00PM y está gente cazando clarias para poder comer, para alimentar a su familia", se escucha decir a una de las personas testigo de la escena en el material publicado por Báez Guerrero en su perfil de Facebook.

Varios de los muchachos logran sacar las clarias del fango con las manos y meterlas en sacos.

La claria, una especie invasora que desde hace décadas se introdujo en Cuba, tiene la capacidad de vivir en alta densidad con su misma especie, además de que no necesita de agua con calidad y se puede alimentar de formas muy variadas.

Esas mismas características son las que preocupan a los expertos, por el peligro que representa este animal para el hábitat y la supervivencia de otras especies. 

A pesar de estos riegos, las autoridades han promovido su cría en medio del desabastecimiento creciente de productos en la Isla y sobre todo de alimentos proteicos como la carne de cerdo y el pollo. 

En mayo de 2020 el periódico provincial Vanguardia, de Villa Clara, presentó la historia de un antiguo productor de carne de cerdo que decidió abandonar su labor para iniciarse en la cría de estos peces de agua dulce, que se han vuelto abundantes en el país, pero su consumo no es asumido por toda la población.

Son frecuentes las imágenes de personas en Cuba que logran sacar clarias hasta de las alcantarillas. Además de hacerlo con propósitos de autoconsumo muchos las venden para comprar otros productos.

https://diariodecuba.com/cuba/1617096758_29972.html