Sin productos para poner en las farmacias, el régimen solo apela a más 'control' para aplacar las 'insatisfacciones' de la población.
Sin solución a la vista para la escasez de medicamentos en Cuba, sin poder surtir de productos a las farmacias, al régimen lo único que se le ocurre es recurrir al control para aplacar lo que llama "insatisfacciones" de la población.
"El propósito fundamental de una farmacia es dispensar medicamentos y, si no hay, es muy complejo cumplir con ese rol. Hemos enfrentado, y aún tenemos, una situación de desabastecimiento importante en la red", admitió el doctor José Ángel Portal Miranda, ministro de Salud Pública, en la Comisión de Salud y Deporte de la Asamblea Nacional del Poder Popular, publicó el portal oficial Cubadebate.
Según Portal Miranda, "cada día se hacen grandes esfuerzos para lograr que los medicamentos con que se cuenta lleguen a las comunidades", pero siguen sin ser suficientes para paliar la grave situación que enfrentan sobre todo los enfermos crónicos.
El ministro atribuyó las carencias al déficit de financiamiento que tiene el régimen, que impide acceder a los recursos que se necesitan, al chivo expiatorio predilecto del régimen, el embargo de EEUU, y al encarecimiento de las materias primas y el coste de los fletes.
"Ello no solo provoca problemas en la calidad de la atención médica, sino en la satisfacción de la población", sostuvo Portal Miranda, que admitió problemas en la producción, importación y dispensación de fármacos tanto en farmacias comunitarias como en instituciones.
"Decir que esta situación se va a resolver en los próximos días sería irresponsable. Las soluciones pasan por un esfuerzo, sobre todo, desde el punto de vista financiero, pero también de organización interna y funcionamiento de toda la cadena desde la producción hasta el expendio en las farmacias. Hay mucha gente que está cada día, desde la industria y en las farmacias, esforzándose para buscar mejores alternativas", dijo el ministro, a tono con pedidos de más "control".
La diputada Cristina Luna Morales, presidenta de la comisión, dijo que los principales estados de opinión de la población, en relación con el funcionamiento de las farmacias, se centran en la falta de medicamentos, la organización de la venta según pedidos y la presencia en las comunidades de fenómenos como la venta ilícita de fármacos.
El mercado negro es la opción de doble filo que queda a los cubanos atrapados entre sus padecimientos, la escasez y la inflación.
Al margen de vendedores ambulantes, que por lo general comercializan los fármacos de factura nacional en el mercado negro, hace alrededor de tres años en la ciudad de Santiago de Cuba, como en toda la Isla, han proliferado las farmacias particulares. Su aparición se produjo después de que el Gobierno autorizó a los viajeros la entrada de medicinas sin costo adicional al peso aprobado para el equipaje.
Según datos presentados, Cuba cuenta con más de 3.000 unidades en los servicios farmacéuticos, en las que se incluyen 2.202 farmacias comunitarias y más de 600 en instituciones.
El actual cuadro básico de medicamentos está conformado por 651 productos. La industria genera un 62% del total, con 401 renglones, mientras que 250 son importados por el Ministerio de Salud Pública. De este cuadro, 292 medicamentos son de venta en la red de farmacias. El reporte oficial no incluyó cifras sobre la cantidad de productos afectados por el desabastecimiento y la irregularidad de la producción. En julio de 2023 eran más de 250 medicamentos en falta.
Ese año un estudio de Cubadata demostró que existe una clara tendencia hacia una mayor dificultad en el acceso a medicinas en Cuba. Más de la mitad de los cubanos encuestados (55,8%) calificó como "imposible" el acceso a medicamentos.
Si se suman los resultados de las categorías de "mucha dificultad" e "imposible", el 80,3% de la población consultada enfrenta serios problemas para obtener medicamentos. Esto indica que es un drama generalizado en la población cubana.
https://diariodecuba.com/cuba/1721125502_56041.html